jueves, 2 de diciembre de 2010

me and donny, we believe in music

Obsesionada desde niña en la vida del tiempo, tiempo que marca la música naturalmente…

Amo moverme y equilibrar mi vida recordando que puede terminar al final de cada movimiento.

Inexperta viví la coreografía de mis padres, de mis hermanas, de mis amigas, y creo que pocas veces la mía ya que siempre alguien me impulsaba al movimiento, pero no creo que eso sea algo malo ya que era y es en ambas direcciones.

Ya sea para abrazar al que me provoca amores o para alejarme de lo que me causa aversión, y es qué tenemos tantas opciones de movimiento, lo que falta es voluntad.
Todo te provoca moverte, desde el azul del cielo que te pide que voltees a verlo, no sin antes que las nubes se interpongan en tu camino.

Todo es un gran baile donde no hay espacio, ni tiempo porque tienes miedo que el de al lado te pise o te choque mientras intentas llegar a donde quisieras estar.

Esta coreografía que me ha hecho vivir sin saber qué pasará me ha hecho regresar una y otra vez a lugares en donde ya he cantado una y otra vez sin que me escuches o pueda empujarte de mi vida y seguir caminando… Escucha, porque ahí he estado escondida.

No todos escuchamos la misma música y a veces sólo queremos descansar de la gente que constantemente nos da en el hombro haciendo que desviemos la mirada.
Ya se me rompió la punta del lápiz.

No hay comentarios: